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“Huid de la fornicación. Cualquier otro pecado que el hombre cometa, está fuera del cuerpo; mas el que fornica, contra su propio cuerpo peca”.
No podemos negar que la tentación esta a la orden del día, todos los días seremos tentados para caer en diferentes pecados, pero dependiendo de nuestra relación personal con el Señor seremos o no mas vulnerables a dichas tentaciones.
La voluntad de Dios es que nos mantengamos cerca de El para ser mas fuertes a la hora de la prueba, pero lastimosamente la contraparte es que cuando por “a” o “b” motivo nos vamos alejando poco a poco del Señor y de su comunión seremos presa fácil para que el enemigo haga de las suyas con nuestras pasiones carnales.
Es así como muchos jóvenes y no tan jóvenes son tentados a caer en el sexo antes del matrimonio, la Biblia se refiere a este acto como: Fornicación. Gálatas 5: 19 dice: “Y manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia…”.
Tener relaciones antes del matrimonio de ninguna manera va ser excusable, definitivamente es un acto DESAGRADABLE ante los ojos de Dios. La Biblia dice en Colosenses 3: 5 y 6: “Haced morir, pues, lo terrenal en vosotros: fornicación, impureza, pasiones desordenadas, malos deseos y avaricia, que es idolatría; cosas por las cuales la ira de Dios viene sobre los hijos de desobediencia”. Por más que quieras cubrir ese pecado o excusarte en que pronto te casaras o que solo lo harás una vez y nunca más, no hay excusa valedera. La Biblia es clara en prohibir dicho acto, porque dime tú, ¿Qué tienen en común la Santidad de Dios, con el Pecado carnal de la fornicación?, ¡Nada!, son dos cosas totalmente contraria, es como que quisieras comparar a Dios con Satanás, o el color blanco con el negro.
¿CÓMO SE CAE EN ESTE ERROR?
Es obvio que tener relaciones antes del matrimonio no fue una simple casualidad que se dio sin antes haberlo pensado. Al contrario fue algo meditado y que fue provocado por diferentes situaciones como: estar a solas, permitir caricias en nuestro cuerpo o en partes de nuestro cuerpo que nos excitaron, besos candentes que alborotaron nuestras hormonas, imágenes que vimos previamente, etc.
La Biblia dicen en Santiago 1: 13 al 15 “Cuando alguno es tentado, no diga que es tentado de parte de Dios; porque Dios no puede ser tentado por el mal, ni él tienta a nadie; sino que cada uno es tentado, cuando de su propia concupiscencia (deseos) es atraído y seducido. Entonces la concupiscencia (los deseos), después que ha concebido, da a luz el pecado; y el pecado, siendo consumado, da a luz la muerte”.
Todo comenzó con un besos “apasionado”, con unas caricias “sensuales”, en un lugar premeditado en donde muy bien sabias que nadie te iba a molestar. Antes de seguir, ¿Aun crees que fue algo que paso sin pensarlo?, no nos engañemos, fue meditado, lo pensaste antes de hacer, lo analizaste, sabias que estaba mal, pero aun así no te detuviste y caíste en el pecado de la fornicación.
Para muchas chicas y chicos era su primera vez, y estoy seguro que no tienen un buen recuerdo. Y es que el sexo antes del matrimonio jamás será gozado, pues quiérase o no hay una sensación de que estas cometiendo un gran error y que pueden venir consecuencias duras.
Diariamente recibo cartas y comentarios de jóvenes que me hablan de cómo cayeron en pecado y lo mal que se sienten después de haber hecho eso, jovencitas que se sienten ahora sin valor, jóvenes que se sienten desprotegidos de la voluntad de Dios y todo por unos minutos de placer.
Cada vez que leo un correo como esos me doy cuenta de la falta de información que hay en nuestras Iglesias acerca de ese grandísimo error y como el enemigo esta utilizando esa falta de información y de conocimiento para llevar a la derrota a tantas personas a través de dicho pecado.
Pastores y Lideres que me leen, ¿Por qué no estamos informando a nuestras ovejas sobre este error?, ¿Acaso es un tema que a casi nadie le ocurre?, ¿Por qué permitimos que el enemigo callé nuestras bocas en temas que necesitamos impartir?, pareciera que el enemigo nos ha puesto un tapón en la boca que no nos permite hablar en el pulpito de este tema porque aparentemente es demasiado “sucio”. Que triste es ver como Satanás va ganando ventaja en estas áreas, mientras nosotros nos quedamos callados viendo como mas jóvenes y no tan jóvenes destruyen su vida a través de este pecado que bien pudo haber sido evitado con información y enseñanza.
“Mi pueblo fue destruido, porque le faltó conocimiento…” (Óseas 4: 6a)
¡CAÍ Y ME SIENTO MUY MAL!
Definitivamente el caer en este pecado no será razón para estar orgulloso, en primer lugar porque le fallaste a Dios pisoteando su sangre, esa sangre con la que un día lavo tus pecados, en segundo lugar porque irrespetaste a tu novio o novia, tocando partes de su cuerpo antes del tiempo debido. Tercero le fallaste a tu familia y padres, pues ellos te dieron una educación y te cuidaron para que fueras una persona recta en todos tus caminos, y el hecho de haber llegado a ese acto te hizo desvalorar el sacrificio que ellos hicieron por ti. ¿Qué pasaría si ellos se enteraran de lo que hiciste?, ¿Te sentirías orgullo o orgullosa de eso?, creo que no, pero todo esto no se piensa antes de caer en ese pecado, al contrario, pareciera que en ese momento toda la mente se distorsiona y la vista a futuro se nubla por completo lo que te hace el camino mas fácil para caer en ese pecado.
Ahora bien ¿Realmente estas arrepentido de lo que hiciste?, espero que si, porque si en ti no hay ni una pizca de culpa es porque el Espíritu Santo que estaba en ti esta apagado y muy contristado a tal punto que tu mente se ha cauterizado y el pecado ya no te causa ni la mas mínima culpa. ¡Cuidado porque eso no es para nada normal en un verdadero cristiano!
Realmente tú tienes que comprender que lo que hiciste fue un error muy grande, porque Dios estipulo el sexo para el matrimonio y no para otro tiempo. La gente del mundo sin temor de Dios ve esto como algo normal, como algo que es necesario hacer antes de casarse para saber si “son compatibles” en la cama, pero esa es una mentira del Diablo, tu no necesitas acostarte con tu novio o novia para saber si son compatibles en la cama, esa es una de las mentiras mas grandes que Satanás ocupa para llevarte a cometer dicho pecado.
Tampoco puedes excusarte en el hecho que prometiste casarte con esa persona y por tal razón lo hicieron, dime tú: ¿Acaso vale mas tus promesas que lo estipulado por Dios?, Dios dijo que el sexo era exclusivo para el Matrimonio, mas tu quisiste inventar una nueva cláusula en donde prometías casarte si tenían sexo. ¡Por Favor! ¿Qué clase de promesa es esa?, si vas hacer alguna promesa que sea para Dios diciéndole: “Te prometo ser fiel y casto hasta el matrimonio”, ¡Esas son las promesas que valen!
Señoritas y Caballeros que me leen, si tu novio o novia tratan de hacer cualquier clase de cláusula para tener sexo antes del matrimonio ¡DI NO!, muéstrale tu fidelidad a Dios, hazle entender que eso no es lo correcto y que el hecho de esperar al matrimonio es una señal de verdadero amor.
Amor no es caer en pecado y tener relaciones, eso es deseo sexual, amor va mas allá que el puro deseo sexual, amor es comprensión, amor es soportar, esperar y sobre todo RESPETAR.
Si tú has caído en el engaño de Satanás creyendo que con prometer casarte eres libre de tener sexo con tu novia o novio cada vez que quieras, déjame decirte que: ¡ESTAS MUY EQUIVOCADO! “Porque de dentro, del corazón de los hombres, salen los malos pensamientos, los adulterios, las fornicaciones, los homicidios” Marcos 7:21.
El pecado lo que hace es provocar vergüenza, te hace sentir sucio e indigno de la presencia de Dios, el pecado te roba autoridad y te hunde poco a poco.
Posiblemente entre los que me leen hay lideres y personas “muy entregadas a Dios” delante de toda la congregación y que estas en este pecado y quizás digas: “Yo lo he hecho y Dios siempre me respalda”, déjame decirte que Dios es GRANDE en MISERICORDIA y por tal razón te sigue respaldando, El esta esperando que te arrepientas antes de que sea demasiado tarde, si hasta acá El te ha respaldado de esa manera a pesar de tu pecado, ¿Cuánto mas te respaldaría si tu vida fuera una vida santa y entregada?, si realmente amas a Dios, medita sobre eso. Apocalipsis 2:21 dice: “Y le he dado tiempo para que se arrepienta, pero no quiere arrepentirse de su fornicación”.
El conocido personaje Sansón fue un hombre que fallaba constantemente a Dios y aun así Dios lo respaldaba, pero llego un momento que su respaldo fue quitado de su vida y las consecuencias las tuvo que sufrir, no permitamos llegar hasta las consecuencias, evitémoslas buscando a Dios con un corazón sincero y arrepentido genuinamente.
¿QUÉ DEBO HACER SI YA COMETÍ ESTE ERROR?
Lo ideal es no caer en este error por tal razón a las personas que todavía no han caído en este error a ellas les digo: POR FAVOR, ¡NO LO HAGAS! Pues terminaras destrozado y arrepentido de haberlo echo, espera hasta el matrimonio, Dios te ha de bendecir aun más si esperas.
Ahora a las personas que lastimosamente cayeron en este error les quiero decir con sinceridad de corazón que es lo que tienen que hacer:
PRIMERO: Arrepiéntete de ese pecado, pero con un arrepentimiento genuino, Dios que conoce tu corazón a perfección y las intenciones que hay en el, sabrá si tu arrepentimiento es genuino o solo de labios. Hechos 3: 19 dice: “Así que, arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros pecados; para que vengan de la presencia del Señor tiempos de refrigerio”.
SEGUNDO: Pídele perdón al Señor, habla sinceramente con El, dile que estas arrepentido genuinamente y prométele que JAMÁS lo volverás a hacer, que El vale mas que unos minutos de pecado. Que lo que ha hecho por ti es más importante que satisfacer tus deseos sexuales.
TERCERO: Cultiva una vida de devocional, comienza a orar, lee la Palabra, congrégate mas seguido, sírvele al Señor, búscalo porque lo encontraras. Mejora tu relación personal con El para estar más fuerte para el día de la prueba.
CUARTO: Examina y Analiza que fue lo que te llevo a caer en ese pecado y evítalo. Si tú sabes que al estar a solas con tu novio o novia serás tentado, entonces ¡NO ESTÉS SOLO!, si sabes que besarse o acariciarse de alguna forma indebida provocara nuevamente el deseo de tener sexo, entonces ¡EVITAS ESAS CARICIAS Y ESOS BESOS!, tú mejor que nadie sabe que fue lo que te llevo a caer en eso, por tal razón debes de analizar y detectar todas las ocasiones o circunstancias que pueden llevarte a fallar nuevamente y sobre todo EVÍTALAS.
QUINTO: Dios ya te perdono, porque se lo pediste genuinamente por tal razón OLVIDATE de ese pecado, pues cuando Dios perdona no hay porque recordar. No te martirices mas, la voluntad de Dios no es que te pases quejando toda la vida, El te da HOY una nueva oportunidad tómala y comienza nuevamente. Miqueas 7:19 dice: “El volverá a tener misericordia de nosotros; sepultará nuestras iniquidades, y echará en lo profundo del mar todos nuestros pecados”.
SEXTO: Pon en las manos del Señor tu noviazgo, hablen seriamente sobre su deseo de ser fieles a Dios, que su objetivo primordial en la vida sea agradar a Dios, eso llevara a restaurar su relación de noviazgo, Dios puede perdonarlos, pero necesita de ustedes un compromiso, un compromiso serio de ser TOTALMENTE FIELES A EL.
Amados, el pecar es lo que destruye la imagen de Dios en nuestra vida, en todo noviazgo habrán situaciones que los querrán llevar a cometer toda clase de error, pero es ahí en donde cada uno de ustedes tiene que ser concientes del daño que le estarán haciendo al Señor, a su obra y sus mismos cuerpos, respétense y vivan cada día de su existir con el objetivo de agradara a Dios, el sexo puede esperar para el Matrimonio en donde será bendecido y avalado por Dios.
Ahora bien, si tú que me lees estabas pensando en tener relaciones con tu novia o novio y dijiste: “Lo haremos y luego nos vamos a arrepentir”, quiero decirte que en esta hora Dios me dice que te diga:
“¡DETENTE! Eso que vas hacer no es lo que yo quiero para ti y las consecuencias de dicho acto, pueden ser muy duras para ti, NO LO HAGAS, espera porque yo te bendeciré aun mas, solo se FIEL a mi”.
“y al que sabe hacer lo bueno, y no lo hace, le es pecado”.
Santiago 4:17
El deseo de mi corazón es que el Señor traiga a sus mentes y corazones un deseo de ser fieles a Dios, con un corazón arrepentido genuinamente y sinceramente y que sobre todo anhele más del Señor.
Dios esta dispuesto a perdonarte, pero ahora agradezcamos ese perdón siendo FIELES a Él.