La bendicion
“He aquí, herencia de Jehová son los hijos; Cosa de estima el fruto del vientre.
Como saetas en mano del valiente, Así son los hijos habidos en la juventud”.
Es una bendición ser padre, mi hijo ahora tiene un año con un mes y cada día lo disfruto más y aprendo más sobre el amor que Dios tiene por nosotros como hijos suyos.
Uziel esta en una etapa en la que cada día aprende cosas nuevas, me impacta la forma tan rápida que aprende cosas y a la vez me llena de mucho orgullo de padre de que a su corta edad realiza cosas que niños mas grandes aun no las hacen.
El otro día estábamos jugando con el, yo tengo mi guitarra pues aunque no soy un profesional la se tocar y Dios ha tenido a bien darme un poquito de voz como para no desentonar tanto, así que cada vez que tengo un tiempo libre la agarro y toco un poco, pues Uziel cada vez que ve la guitarra llora por estar cerca y tocarla, así que le compre una guitarra pequeñita con cuatro cuerdas y su respectivo estuche, el es feliz con su guitarra, pues jugábamos con el cuando yo le repetía que ese instrumento se llamaba guitarra, la sorpresa fue que en un momento de descuido que tuvimos con mi esposa Yamita, el dijo claramente: “Guitada”, nosotros nos sorprendimos tanto, que nos quedamos viendo el uno al otro con ojos de “no lo creo”, y nos dio risa porque me dice mi esposa: “Si se lo contamos a alguien van a decir que estamos locos”.
Y es que el salmista tenia razón al decir que “Herencia de Jehová son los hijos”, herencia porque te llenan de una felicidad enorme que no la sabes describir, pues se necesita ser padre como para poderla entender.
Antes de ser padre creía que entendía a los padres, pero la verdad es que ni siquiera me imaginaba lo que un padre siente por su hijo. Y es que es un amor único, incomparable, capaz de anteponer los intereses de su hijo a los suyos, capaz de dar su vida por su hijo, es algo que los jóvenes y los no tan jóvenes pero que no tienen hijos no me comprenderán, pero que quiero decirles que es la mejor sensación humana que se puede sentir de amor hacia alguien, es una clase de amor que te lleva a sentir cosas que jamás en tu vida sentiste, es un sentimiento único que no sabes ni como fue que apareció ahí, pero que ahora que esta ahí no lo puedes eliminar porque es incondicional.
Y aunque me tachen de exagerado pero estoy seguro que el amor de un padre hacia su hijo es incondicional, sino veamos a los padres y madres de los reclusos, son las únicas que siguen visitándolos, y es que aunque el hijo sea el mas malo de la historia, sus padres son los únicos que los siguen amando, pues en momento determinado de la vida fueron un obsequio hermoso de Dios.
Personalmente siempre soñé con ser padre algún día, mis mejores amigos y amigas en mi soltería sabían que era un anhelo que tenia, soñaba como seria mi hijo y de lo muchos que me divertiría con el, y ahora que estoy en esta etapa me doy cuenta que no estaba equivocado, que es lo mejor que me ha pasado después de recibir a Cristo y de casarme con la mujer de mi vida.
Y es que Uziel es un regalo de Dios, así como tu eres un regalo de Dios para tus padres y pese a que muchas veces nuestros padres no lo dicen, tienes que saber que te aman con un amor único que Dios tuvo a bien poner en sus corazones, pues tu eres una herencia que Jehová Dios quiso dar a tus padres.
Pero lo mas lindo de todo esto es imaginarse el amor que Dios como Padre tiene por nosotros, y es que si yo amo a mi hijo, ¿Cuánto mas me amara Dios?, y es que si yo estaría dispuesto a hacer cualquier cosa para que el este bien, ¿Cuánto mas Dios lo haría por mi?
Sin lugar a dudas Dios es grande en amor hacia nosotros, no tienes que dudar ni un segundo que Dios te ama y que eres importante para el, pues si nosotros siendo malos sabemos amar a nuestros hijos, ¿Cuánto mas Dios lo hará con nosotros?
Posiblemente tú no tuviste la oportunidad de tener el amor incondicional de un padre terrenal, pero eso puede ser suplantado por el amor que Dios como Padre te puede dar si tan solo le permites que actué como tal en tu vida.
Además que el hecho de no haber tenido el amor de un padre o una madre nos motiva a que nosotros podamos dar mas amor a nuestros hijos, pues no queremos que ellos pasen por las circunstancias difíciles que quizá nosotros pasamos al encontrarnos sin un padre o sin una padre.
La herencia que Jehová te ha dado es para cuidarla, administrarla y sobre todo hacer de ella algo provechoso.
De nosotros depende como estamos administrando esta herencia, cada padre somos responsables de lo que nuestros hijos serán en el futuro, pues si tu cuidas que tus hijos anden por el camino recto, ten por seguro que en el futuro serán hombres y mujeres rectas y justas delante de Dios.
Amemos a nuestros hijos con tal amor que al reaccionar nos demos cuenta que el amor de Dios para con nosotros es mucho mas grande, por lo cual debemos sentirnos seguros en El.