Dios proveera
“Y llamó Abraham el nombre de aquel lugar, Jehová proveerá…”
Vivimos en un tiempo en donde la economía familiar se ve en apuros, en donde los artículos que necesitamos para subsistir cada día suben de precio, donde el desempleo esta a la orden del día y donde el bolsillo nuestro esta siendo constantemente golpeado.
Pese a todo eso todo hijo de Dios tiene que creer en la promesa de que Jehová PROVEERA, esta frase viene del hebreo: Jehová Jireh, es decir Dios nuestro Proveedor.
Pero no podemos negar tampoco que cuando la escasez azota nuestra vida, muchas veces nos olvidamos de esta promesa, buscamos por todos los medios habidos y por haber de salir de esta situación, buscando ayuda por doquier, aun cuando sabemos que Dios es nuestro Proveedor.
Y es que se necesita una verdadera FE para creer a esta promesa porque es una promesa que no estas viendo ni palpando, pero que esta escrita ahí para los que quieren activar su fe.
A principios del año 2008 a mi familia vino una situación difícil y en donde el dinero apenas alcanza para pagar los recibos, fue ahí en donde decidí creer en esta promesa. Había oído muchos testimonios de cómo Dios había provisto para esto o para aquello. Durante muchos años había oído de gente a la cual Dios había bendecido económicamente, proveyéndoles lo que necesitaban, pero hasta la fecha yo no había vivido en carne propia lo que eso era.
Fue así como cada vez que oraba le decía al Señor: “Padre, provéeme lo necesario, has que sobreabunde tu bendición sobre mi familia”. Te seré sincero en decirte que mientras oraba y pronunciaba esas palabras, mi mente se rehusaba a creer que pudiera pasar, había docenas de cuestionamientos en mis pensamientos que me querían hacer volver a la realidad y hacerme creer que no había forma, ni medio por el cual eso pudiera ocurrir.
Sinceramente y hablando en sentido humano, te diré que en parte mis pensamientos tenían toda la razón, a no ser que en mi empleo me aumentaran el cien por ciento no habría otra posibilidad de obtener mas ingresos. Humanamente esta destinado a seguir de la misma forma.
Pero es ahí, en donde nuestra mente se da por vencida es donde por fin se activa la FE, aquella que nos da la certeza de esperar algo y la convicción de que a pesar que no lo veo, se que llegara, no se de que forma, no se por que medio, pero llegara, llegara, porque llegara, porque le hemos creído y El no defrauda a los que con corazón sincero creen en sus promesas.
Fue así en donde de repente Dios abrió una puerta de bendición y de provisión que jamás pensé tener, esa puerta que ha bendecido a mi familia y la cual estoy seguro que vino de parte de Dios.
Desde ese momento en que viví o mejor dicho experimente a Jehová Jireh es decir mi Dios Proveedor, me di cuenta que El escucha nuestro clamor, que a pesar que muchas veces dudamos con nuestra mente, El quiere mostrarse con un Padre que Provee lo que su hijo necesita, además de Padre el es nuestro Pastor y si Jehová es mi Pastor, nada me faltara.
Por tal razón te invito a creer, que no dejes de clamar por tu bendición, si la duda llega a tu mente, hazla aun lado y cree, a pesar de no ver clara una respuesta, sigue clamando, a pesar de que todo dice que no será posible, no dejes de creer, porque cuando menos sientas, de la forma que menos pensaste, Dios te Bendecirá.
Bendigo la vida de todos los que leen este escrito, declaro sobre tu vida una provisión abundante, reprendo al devorador de tus finanzas, proclamo que si eres fiel con el Señor dándole lo que le corresponde, se abrirán las ventanas llenas de bendiciones para tu vida.
¿Por qué temer si tenemos aun Dios Poderosamente Proveedor?