Lo dificil
“Velad y orad, para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad está dispuesto, pero la carne es débil”.
Cuando apenas estaba en el colegio recuerdo que siempre nos inculcaron el estudiar mucho y el obtener las mejores calificaciones.
Estudie en uno de los colegios mas reconocidos de mi ciudad llamado Colegio La Fe, reconocido porque su enseñanza era de primer nivel, puedo decir que gracias a su enseñanza hoy en día mi ortografía no es mala.
Aun recuerdo esos días de colegio cuando el estudiar era una competencia y en donde sacar las mejores calificaciones era una necesidad para no quedar atrás de los demás. Sinceramente en ningún otro lugar donde estudie vi tanto esmero por ser de los mejores como en elColegio La Fe, tenia mas de treinta compañeros y todos eran muy buenos para estudiar , sacarse uno de los primeros tres lugares al final del año era un reto muy difícil si tomábamos en cuenta que todos tenían un gran nivel de estudio y sus notas reflejaban su interés por ser los mejores.
Pero lo difícil de mi grupo no era sacarse un 10, lo difícil era mantener todo el año ese 10 para tratar de ser de los mejores al final del año y obtener un galardón.
Así mismo es en la vida cristiana, lo difícil de la vida cristiana no es llegar a un nivel alto de espiritualidad, sino mantener siempre ese nivel.
En mi vida he conocido a cientos de personas que un día estuvieron en un gran nivel espiritual, llevando una vida agradable a Dios, alejados del pecado y consagrados para el servicio del Señor, pero luego de unos cuantos años desaparecen del mapa, algunos ahora con un nivel muy bajo de deseo de querer agradar a Dios y otros muchos alejados completamente del Señor.
Y es que en la vida cristiana todo es volátil como la gasolina, por eso necesitamos cada día seguir en el mismo ritmo, eso quiere decir que tenemos que mantener el mismo ritmo de oración, el mismo ritmo de lectura de la Palabra, el mismo ritmo de servicio, en fin, en el mismo ritmo de todo lo que tenga que ver con el hecho de alimentarnos espiritualmente para no bajar la guardia.
Quizá en algún momento de tu vida cristiana llegaste a sacarte un 10 en santidad, pero ¿Qué nota tendrás hoy?, ¿Será que ese 10 se ha mantenido?, ó ¿Será que actualmente estaremos reprobados?
Lo difícil en la vida cristiana no es sacarte un 10 en servicio a Dios, lo difícil es mantener siempre ese 10, ¿Y se podrá?, claro que se puede, yo no creo en las personas que dicen que eso solo se da al principio de lavida cristiana y que después de unos años se acaba el deseo de hacer las cosas como se tenia al comenzar su caminar con el Señor.
Y es que no podemos estancarnos, ni muchos menos acomodarnos en la vida cristiana, cada día que pasa es una lucha continua que tenemos entres los deseos de nuestro viejo hombre, con los deseos del Espíritu, Jesús lo dijo en una frase: “A la verdad el espíritu esta dispuesto, pero la carne es débil”.
Y es así mis amados, el espíritu esta dispuesto, pero la carne es débil y por esa razón necesitamos cada día luchar con nosotros mismos, luchas contra aquello que humanamente quiero hacer, pero que se que al hacerlo desagrado a Dios.
Se que todos queremos mantener ese 10 en nuestra vida cristiana, pues anhelamos un día obtener nuestro galardón después de esta dura batalla, pero en el camino nos enfrentaremos con circunstancias que nos querrán hacer bajar la guardia, quizá en algún momento bajaremos a 9, quizá de pronto aparecerá un 8 por ahí, y en algunos casos andaremos tocando la nota mínima entre aprobar y reprobar, pero que lindo será, que no nos rindamos, que lindo será que no nos demos por vencidos, ante esas notas, sino que al contrario, tratemos cada día de mejorar nuestras notas delante del Señor hasta llegar al 10, ese 10 que nos llena de satisfacción y nos fortalece, ese Diez que es dedicado en especial a nuestro Padre Celestial como una muestra mas de que estamos comprometidos a vivir para El.
¿Qué notas estaremos llevando actualmente?, que el anhelo de nuestro corazón no sea sacar un 10, sino que el anhelo de nuestro corazón sea siempre mantener ese 10 hasta el final.